Poco tiempo después del diluvio, los hombres se volvieron a multiplicar sobre la faz de la tierra. Estos se extendieron hacia la tierra de Sinar (Génesis 11:2), una zona bien regada y fértil. Fue en esta tierra que la ciudad de Babilonia fue construida, siendo su edificador Nimrod, hijo de Cus (Génesis 10:8). Esta ciudad fue la cuna de las civilizaciones, pero también fue la cuna de la idolatría.
Apóyanos para seguir adelante con este ministerio:
Suscríbete a nuestro canal de Youtube:
Síguenos en Facebook:
Dejar una contestacion